La batalla de las palabras

Ante una desgracia como un atentado terrorista, la respuesta popular usualmente es "menos palabras y más hechos". Sería maravilloso que las fuerzas de seguridad desarticulasen completamente todas las organizaciones terroristas, pero es dificil detener a un hatajo de alimañas excitadas contra víctimas indefensas.

En cambio, no debemos subestimar el poder de las palabras, porque las palabras convencen a la gente y la mueve a obrar hechos. Las lenguas inculturizan, educan y esclavizan. Con el latín se romanizó el mundo; con el castellano se unificó España; con el catalán ricos empresarios apoyados por insensatos pobretones pretenden disgregar esa unión; la ETA y Batasuna nos consuelan diciendo que están matando a personas por el bien del vasco.

Dicen que no habia libertad de expresion durante la dictadura. Los gamberros que organizaron la banda terrorista ETA decian matar en defensa de la libertad de expresion del pueblo vasco. Hace un tiempo conocí un matrimonio jubilado de Rentería que me aseguró que vivían tranquilos porque a ellos, que no estorbaban la estrategia etarra ni tenían cargo público, no les pasaría nada. Vivian tranquilos porque no utilizaban su derecho a la palabra. ?Cabe mayor degradacion de la libertad? ?Puede alguien explicarme que mejora ha obtenido este matrimonio de Renteria con la Transicion? ?Que diferencia hay entre esto que sucede ahora en el Pais Vasco y lo que sucedia durante la dictadura franquista?

Los espanoles se atribuyeron el derecho a la libertad de expresion mediante la Constitucion Espanola de 1977. Yo no vivi la epoca de Franco, pero veo que en el Pais Vasco los mejores articulos de la Constitucion Espanola todavia no han entrado en vigor.

Esta respuesta del matrimonio de Renteria es la mayor victoria de ETA en la sociedad: ha convencido a la mitad de los espanoles de que la única forma de paz consiste en dejarle hacer, como los padres permiten a los niños hacer lo que quieran con tal de que no den la lata. Los nacionalistas y los etarras han ganado la batalla de las palabras y, dado que estos espanoles ilusos eligen la rendicion antes que la lucha bajo el imperio de la ley, los enemigos de Espana tambien estan ganando la de los hechos.